domingo, 22 de abril de 2012

Arbolito

El Arbolito

Aquel verano fue muy duro para un ser tan frágil como tú, eras sólo un matorral junto al puente de la frontera y en cada paseo matutino calmaba tu sed. Recogía la vasija de tus pies y la llevaba a un cercano charco infestado de Dafnias; en el camino de vuelta cargaba el agua que vertía a tu altura. Y así día tras día.
Como agradecías el desayuno cada mañana que te animaba a soportar los días de intensa canícula y así cada fin de semana me mostrabas tus hojas de chopo cada verdes y brillantes de esmeraldas planas vivas al sol
Un tiempo me olvide de ti, no por negligencia sino porque mi errabundo caminar no pasaba ya por ti.
Este invierno he vuelto a ti y a pesar de ser el mas “Enano” de todos los árboles del contorno alguien con alma árbofila portuguesa te ha podado el pie y te ha maquillado fino.

Y, allí sigues en este invierno crudo, perdido entre las nieblas, guardián del camino. Ya no me necesitas. Y cuando rompa la próxima primavera y te arropes de hojas, algún pájaro te elegirá para sacar a su prole en ti y con sus trinos se que se te alegrará tu corazón de árbol.

CECI-020208

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.